viernes, 29 de junio de 2012

ISTANBUL

Muchas cosas recuerdo de Estambul,

nacionalismo motivo colores estampado música costumbre orgullo  religión respeto inmaculado agua pescadores comida azul urbano diseño barco moda antiguo ladrillo historia mezquita narguila personalidad.

Todas imágenes que aparecen y se hacen una sola, muy difíciles de separar. 
Una cuidad extremadamente turística, pintoresca, llena de cosas. 
Un lugar para recorrer, pasajero para mi.

Matiolo


DEL CUARTO AL PRIMER MUNDO EN 6 HS 50 MIN

Así de brusco fue le cambio, pasando por la zona neutra de los aeropuertos, metro y un tranvía que me deposito en un lugar totalmente diferente.
Ahí nos bajamos en el centro de Estambul, me gustó desde el principio, todo estaba limpio, el paisaje urbano lo dominaban las mezquitas, a un lado Santa Sofía del otro la mezquita azul, entre ellas fuentes, verde...gente mucho mas parecida a lo que conocía de antes...Europa!
Angostas calles de adoquines con grandes pendientes, el agua presente en todas las vistas, bares con toldos le daban color a las calles.
Volvimos a la modalidad de viaje que puedo decir que mas me gusta, por la mia, a manejarse, esa sensación fue de lo mas lindo, llegar a ese lugar increíble, no tener ni idea donde quedaba el hostel que habíamos reservado, buscarlo y encontrarlo en 10 min...esa es una de las cosas que he incorporado, creo no estar perdido en ningún lado y a la vez estarlo...
Caminar a la deriva, dejar que los destinos se interpongan en el camino fue la forma de proceder, así conocimos y bastante.

 

Pablito

miércoles, 27 de junio de 2012

MÚSICA

Finalmente llegó el día que nos imaginábamos desde Montevideo. El día de la música. A lo largo del viaje se nos hizo difícil visualizar el momento, mucha información por todas partes y los momentos para pensar e imaginar no eran demasiados. No es que hayamos encontrado esos momentos en esta parte del viaje sino que simplemente la cosa fluyó y de un momento a otro la camioneta se encontraba caminando en busca de instrumentos. Un tambor fue lo primero que apareció, a los pocos minutos el equipo tenía dos guitarras también. Bastó una cerveza y la primer zapada en una esquina cualquiera para que otro tambor completara el primer día de shopping.

Esa misma noche salió tocata en una plaza, muy uruguayo todo. La gente se acercaba a escuchar y eramos muy bienvenidos en el barrio. Un turco que llevaba escuchando largas horas nos regaló una bolsa llena de frutas y debemos reconocer que fue un momento muy muy hippie.

Impulsado por la amena noche de música y la impotencia de no tener instrumento, La Broca no perdió ni un día más y salió acordeón. No pudimos evitar sentarnos en otra plaza a tocar. Ésta vez era de día y la plaza ya no era de barrio sino que se trataba de Santa Sofía.
Luego de unos minutos... 12 liras turcas.

Cuatro meses aproximadamente por delante en una camioneta con más instrumentos que personas... casi... ¡Que siga sonando!









BIENVENIDA

Legamos a Estambul. Del aeropuerto al metro. Del metro al otro metro. El primero subterráneo. El segundo en la superficie. Nos pasamos de parada. Caminamos. Legamos. Salimos a comer. Que mejor bienvenida...



Matiolo y Pablito

martes, 26 de junio de 2012

domingo, 24 de junio de 2012

EL RÍO QUE CALLA

ACTO 1


Nuestro primer movimiento fue ir a orillas del Ganges y déjenme contarles que al igual que Pablito todavía no logro darme cuenta que fue más impresionante, lo que estaba aconteciendo en ese lugar o el trayecto hacia el mismo.

Salimos del hotel y una avalancha de hombres, todos mal alimentados y con las ropas más sucias que vi, cayeron sobre nosotros. Se suponía debíamos elegir a uno para que nos lleve en su bicicleta cuatro kilómetros en alguna dirección hasta el Ganges. La elección no fue difícil, bastó con abrirnos paso entre todos ellos para ver al fondo, solitario, un hombre que a diferencia de los demás, prefirió esperar sentado al costado de su transporte.
Segundos más tarde allí estábamos, sobre una bicicleta de tres ruedas, con espacio para dos personas que serían arrastradas por el humilde conductor hasta el fin del mundo por dos pesos.

El tráfico: autos, motos, bicicletas, personas; los monos observaban desde los techos. Todos se mueven en distintas direcciones y dejan obsoletas a las reglas de tránsito que parecen no ser muchas.
Mientras dan concierto las bocinas, los gritos y los motores, el polvo se eleva pintando al ambiente en tonos de amarillo, tapando las narices agradecidas de ser privadas del olfato. Entre mugre y olores las vacas son las únicas que mantienen la calma, todos y todo lo demás forman parte del caos.

ACTO 2

Una celebración religiosa. Luces, música, danza, ofrendas.

ACTO 3

La niebla y el agua suspendían en el aire pequeños barcos. Tras cruzar el Ganges tierra infinita 
se perdía en el horizonte.

ACTO 4

Del otro lado, donde suceden las cosas, el paisaje se tupe de objetos. Todos y todo ahora en 
función del agua sagrada.

ACTO 5




































Construcciones en estado de abandono, aparente, llenas de colores y óxido. La gran escalinata. Un rito el camino hacia el agua. El calor agobiante y la potencia del sol combinan a la perfección con el deterioro generalizado y borran las tintas que dan vida a un lugar lleno de muerte, enfermedad y peste. La satisfacción en la agonía de quién va a morir a ese lugar... y el orgullo del que lo cuida.

ACTO 6





































La casta más baja dentro de la casta más baja haciendo su labor. 
Es cuestión de organización. ¡Que afortunados son algunos!  

ACTO 7




































Mientras algunos lavan y otros mueren la familia se purifica.
Del otro lado del Mundo... usamos el agua una vez y la tiramos.

ACTO 8

Hogar dulce hogar.

ACTO 9




































...

ACTO 10
Camino al autobús una niña de aproximadamente 10 años se acerca. Su intención era venderme unas pinturas de colores. Caminó a mi lado un buen rato y lo que era una conversación de vendedor a cliente se convirtió lentamente en una de persona a persona.
Esos pocos años le bastaron para aprender a valerse por sí misma, para hablar español e inglés, aprender a no dar lástima, a como tratar cordialmente a otra persona y como hacerla sentir mucho más chica que ella.

Matiolo



Se complica para evitar comparaciones con Nepal, al igual que pasó con Japón y China...
La modalidad de viaje fue la misma, excursión...esta vez no estuvo tan bueno, tuvimos solo 4 días y recorrimos 3 ciudades...pasamos arriba del bondi.

El avión nos dejo en Varanasi, la ciudad sagrada para los hinduistas, llegamos al hotel y de ahí fuimos en unos carros a tracción humana a ver una ceremonia en el Ganges, no se que fue mas impresionante si la ceremonia o el recorrido...no me sentí bien viajando por ese medio, un tipo pedaleando un carro con 2 personas arriba con mas de 40 grados de temperatura...que decir del recorrido, lo que vi fue mucha pobreza, aunque tienen mejor infraestructura la gente se ve mucho peor que en Nepal, la felicidad en India no la vi...y como estar bien en ese lugar, el transito es un desastre, bocinas y mas bocinas, caos, van a contramano, se putean...
A la mañana siguiente fuimos de nuevo al Ganges, criminal, me levantaron a las 4am para dar un paseo en bote, recorrimos 2 de los Gaths mas importantes, estos son los lugares donde creman a la gente...todo convive en ese rio sagrado, lavan ropa, se bañan, tiran las cenizas de los muertos, a los muertos...difícil de entender, mucho mas de explicar.



Volamos a Delhi, ahí cambio un poco la cosa, mas infraestructura, se parecía mas a una ciudad aunque la pobreza seguía saltando al ojo, por todos lados, mugre.
Llegamos a la noche y a la mañana emprendimos viaje hacia Agra, alrededor de 6hs para llegar a la 1 de la tarde con 45, 46 grados al Taj Majal...una joyita, podría estar en cualquier otro lado, proporciones perfectas, brilla. Recorrimos los jardines y el interior donde estaba un poco mas fresco pero el olor a indio era insoportable, huelen muy mal...








































De ahí a un hotel con piscina, fue los mas tranqui que hicimos, igual duro poco, a la mañana de nuevo al bondi hacia Delhi, la recorrimos un poco, estuvimos por unas ruinas que creo eran persas, la puerta de India donde fuimos la atracción, la gente se sacaba fotos con nosotros, fuimos lo que se exponía...el resto todo desde el bote, una vuelta manzana por el parlamento y así mas...










































Creo dejar claro mi sentir con respecto a como me hicieron conocer India, desde un ómnibus, con calor, contra reloj...muerte a las excursiones!

Pablito